En junio de 2024, presenté la exposición fotográfica «Bizilagunak», un proyecto que nació con la intención de poner en valor a las personas que forman parte de nuestra comunidad. A menudo, pasamos por alto las historias que nos rodean, pero cada vecino, cada rostro y cada oficio es un testimonio vivo de la riqueza de nuestros municipios.

La muestra tuvo lugar en el Bar Katilu de Legazpi, donde expuse diez retratos de vecinos de la localidad, algunos de ellos representando antiguos oficios. Como detalle especial, la última fotografía se mantuvo en secreto durante una semana, creando expectación entre los asistentes. Al final, se reveló quién era la persona detrás de la imagen, generando una conexión aún más profunda con el proyecto.

«Bizilagunak» fue un homenaje a la gente de Legazpi, una forma de reconocer su presencia, su trabajo y su historia a través de la fotografía. Sin apoyo de entidades, esta exposición fue una iniciativa personal con un solo objetivo: demostrar que no hace falta ir lejos para encontrar inspiración, que en cada calle, en cada rincón de nuestra comunidad, hay personas extraordinarias que merecen ser vistas y valoradas.

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